Flota y simuladores

La escuela de pilotos Adventia cuenta con una moderna flota de aviones perfectamente adaptada a las necesidades de una instrucción de máxima calidad y con una dotación de simuladores que actúan como un complemento perfecto para la mejor formación de nuestros pilotos.

Antes de llegar incluso a volar por Europa en un avión de grandes prestaciones como el Beechcraft King Air, exclusivo entre las escuelas de aviación de Adventia European College of Aviation, los alumnos siguen un proceso lógico de aprendizaje que comienza con la Tobago TB10 de fabricación francesa en la que los alumnos hacen sus primeras 100 horas de vuelo y que según destaca Adrián García, Jefe de Instrucción en Vuelo de la escuela, “es un aparato al que los alumnos le cogen bastante cariño ya que en él realizan su primer vuelo solos, una experiencia que difícilmente olvidarán en su vida”.

Tras la Tobago TB10, los alumnos realizan la fase instrumental básica y se examinan de vuelo visual con referencias al suelo en un Beechcraft Bonanza, un avión de fabricación americana considerado como el Rolls Royce de la aviación general. Posteriormente a bordo del Beechcraft Barón los futuros pilotos comerciales realizan sus viajes por toda España , aprenden el vuelo asimétrico y consiguen, tras examinarse con este aparato, su ansiada licencia de multimotor instrumental.

Tras esta formación, los alumnos de Adventia pueden ya disfrutar del excelente Beechcraft King Air con el que según palabras del Jefe de instrucción en Vuelo de la escuela “tienen la excelente oportunidad, ya sin presión añadida, de demostrar todos los conocimientos adquiridos durante su formación en un vuelo por distintos países de Europa”.

Respecto a los simuladores, Adventia cuenta con cinco tipos diferentes, cuatro de ellos del mismo fabricante americano, Frasca. Los estudiantes se inician con el Frasca 101, entrenador básico de vuelo por instrumentos en el que los alumnos pueden realizar prácticas ilimitadas a lo largo de todo el curso para conseguir una máxima destreza, el Frasca 142 en el que se inician en el aprendizaje de aproximaciones con visibilidad reducida, el Frasca TruFlite que cuenta con un entorno visual de 180º y con el que se realizan las prácticas de viajes en diferentes condiciones y se simulan todo tipo de posibles incidencias en vuelo y, por último, simultáneamente ya al vuelo en el King Air se emplean el CPT 90 y el Frasca 242 para entrenar los procedimientos y las operaciones propias de una compañía aérea.